opinión
El 2021 fue un año difícil para el sector de manufactura y proveedores de la industria automotriz. Algunas predicciones en la medida que la industria se adapta a los golpes del COVID
Después de dos años de un mercado con varias disrupciones, las empresas automotrices están ansiosas de contar con noticias positivas. Ya algunas regiones y segmentos verticales están moderando los riesgos y ocupándose de las faltas con mudanzas ágiles y estratégicas creativas. Implementan modelos pragmáticos de mejores prácticas mientras afrontan grandes pérdidas en su facturación debido a la escasez de microchips. Sin duda el 2021 fue un año difícil en este sector, y a continuación hacemos algunas predicciones considerando los fuertes golpes que dio el COVID a la industria automotriz
1. La disrupción no se acabó
Las secuelas de la pandemia del COVID-19 seguramente se sentirán durante años, por lo que las empresas deben estar atentos a los cambios del mercado y sensibles para brindar un ambiente seguro para los empleados. Las distintas posturas del personal sobre las vacunas y las políticas de testeo irán evolucionando a medida que avanza la pandemia y los estudios médicos. La resistencia de los empleados y los retos políticos y legales influirá en la capacidad de mantener las plantas funcionando con capacidad completa. Algunas tareas administrativas pueden ser realizadas por empleados en forma remota, y reuniones por zoom pero las tareas de ensamblaje automotriz son presenciales.
2. La seguridad de los productos debe ser una prioridad
No se puede culpar por todos los temas existentes al COVID. Enormes cambios ya se veían en el horizonte antes de la pandemia. La innovación especialmente en lo relacionado con vehículos eléctricos, dejó lecciones difíciles sobre la necesidad de testeos cuidadosos antes de lanzar nueva tecnología y componentes. El riesgo de incendio debido a las baterías de litio es solo un ejemplo. Este tema fue analizado desde todos las áreas, con reformas y seguridad ya instaladas. Afortunadamente, la gestión del ciclo de vida del producto ayuda a las automotrices y proveedores a gestionar el proceso íntegro, en todas sus etapas.
3. La agilidad es primordial
La industria automotriz experimentó recientemente varios cambios de paradigmas, especialmente impulsados por la imparable estrategia C.A.S.E. (Conectividad, Autonomía, Compartir/Suscripción y Electrificación). Esto impacta a todos los aspectos de la industria; diseño del producto, desarrollo, manufactura distribución, ventas, servicio y post venta. La experiencia del usuario has sufrido importantes transformaciones, con hasta vehículos de medio precio que están ahora equipados con detalles de lujo adicionales que se están volviendo estándar. Este tipo de cambios a un nivel sin precedentes de agilidad y con soluciones tecnológicas acorde. Las soluciones basadas en la nube son rápidas y fáciles de implementar, brindan la flexibilidad y escalabilidad en el lanzamiento de nuevos proceso operacionales y nuevas alianzas.
4. Más empresas ingresarán en el mercado de los chips
Los vehículos modernos utilizan una variedad de microchips, cualquiera sea su nivel.. Suponemos que la escasez de microchips perdurará en el 2022 y es un tema del que la industria se debe ocupar. No hay una respuesta fácil ni rápida. Algunas OEMS están tomando el tema en sus propias manos, empezando la producción de microprocesadores. Aunque esto puede significar mayor control, muchos consideran que esto es poco práctico económicamente ya que los chips son de muy bajo costo, y la inversión en la producción de chips toma mucho tiempo en recuperarse. Las organizaciones deberán anticipar los cambios, y actuar en forma más rápida para garantizar el suministro adecuado. Las alianzas y asociaciones colaborativas serán más importantes en el 2022. Las herramientas de colaboración en la nube ayudará a gestionar estas relaciones multi empresariales.
5. La mayor visibilidad será el salvavidas
Para las empresas de manufactura de vanguardia, el software será el salvador. La manufactura de microchips puede no ser la respuesta para todas las organizaciones, pero volcarse a la tecnología es con certeza la táctica que se debe implementar. Las herramientas para el planeamiento de la cadena de suministro pueden ayudar a las empresas a monitorear el inventario, las entregas, rutas de transporte, entregas esperadas y el impacto en las órdenes de ventas en caso una entrega se demore. Aunque la visibilidad no logrará que los componentes lleguen más rápido, saber la situación ayuda a prepararse, buscar alternativas y establecer expectativas reales con los clientes. Hace una diferencia.
6. Business intelligence transforma el caos en estrategia accionable
A medida que las empresas establecen estrategias de recuperación, la visibilidad de los datos será esencial para entender los cambios, y el impacto financiero que pueden traer. Se necesitarán nuevas maneras de anticipar y medir el impacto y de predecir resultados en toda la organización. La inteligencia aumentada, inteligencia artificial, machine learning, y plataformas digitales serán críticas. Solo las soluciones modernas avanzadas podrán enfrentar los retos.
7. Reclutamiento de talentos, aumento de la retención
El reclutamiento de los talentos será parte de la agenda estratégica, de manera de competir y ser exitosos en el 2022 y más allá. Todos los roles estarán involucrados. Las habilidades blandas como colaboración, trabajo en equipo, resolución de problemas, gestión de datos y servicio al cliente, serán tan importantes como la capacidad para operar la maquinaria.
8. La sustentabilidad continuará incrementando su importancia
Las ramificaciones ambientales continuarán teniendo un impacto considerable en las tendencias y dirección de la industria. La “Sustentabilidad industrial Circular” y la ‘Huella de Carbono'' son dos términos que ya forman parte del léxico del sector de manufactura y aparecen cada vez con mayor frecuencia en debates sobre el futuro del sector automotriz, y los autos eléctricos son considerado por algunos como la solución. Sin embargo, es importante destacar que los autos eléctricos presentan sus propios retos ambientales, el alto consumo energético en su manufactura, los elementos altamente destructivos y tóxicos de minería, el problema de las baterías rellenas con material tóxico que luego deberán ser eliminadas y el aumento en la demanda de electricidad. Se necesita una mirada más amplia para evaluar todos los retos y no solo fijarse en las emisiones y mirar más allá de los intereses políticos y socio económicos. La capacidad para recolectar efectivamente datos de distintas fuentes dentro y fuera de la industria será importante para la toma de decisiones al respecto.
Conclusión
El 2022 probablemente venga con retos similares a los del año pasado para las empresas de manufactura automotriz y habrá también algunas sorpresas. Las organizaciones deben estar preparadas para los retos conocidos, pero por sobre todo para los imprevistos, Si hay algo que hemos aprendido en el último año y medio es que no podemos dar por sentado la “normalidad”. Resiliencia, agilidad, adaptabilidad y colaboración son las nuevas monedas que debemos manejar. Las soluciones tecnológicas de vanguardia en la nube son una base robusta para avanzar en este mundo constantemente disruptivo.
*Por Rubén Belluomo, Gerente Comercial de Infor Cono Sur.