sociedad
Se trata de uno de los accidentes más comunes en los hogares en la época invernal, la cifra de
accidentes fatales en nuestro país asciende a 200 casos por año.
Por eso, La Perseverancia Seguros explica los síntomas que uno puede detectar frente a una posible
intoxicación y cómo prevenirla.
En Argentina ocurren alrededor de 1700 casos de intoxicación por monóxido de carbono por año, de
los cuales 200 resultan ser fatales. Por eso, el equipo de La Perseverancia Seguros, con más de 116 años de trayectoria protegiendo a la comunidad en todos los ámbitos de
la vida brinda recomendaciones para evitar estos incidentes.
El monóxido de carbono es un gas incoloro, inodoro, insípido (no es detectable a través de nuestros
sentidos), producido mediante la combustión de gas oil, madera, propano, carbón y otros
combustibles. Los aparatos eléctricos y los motores que no se ventilan de forma correcta, en
particular en espacios cerrados como las habitaciones en invierno, pueden generar que el mismo se
acumule hasta alcanzar niveles peligrosos para el ser humano.
Cuando se acumula monóxido de carbono en el torrente sanguíneo, puede haber una intoxicación,
ya que el cuerpo reemplaza el oxígeno en los glóbulos rojos con monóxido de carbono, y esto puede
generar un daño grave en el cuerpo, e incluso la muerte. Este tipo de intoxicación suele ser más
peligrosa en los momentos en que las personas están durmiendo.
6 síntomas que se pueden detectar frente a una posible intoxicación por monóxido de carbono:
1. Dolor de cabeza punzante
2. Debilidad
3. Mareos y visión borrosa
4. Náuseas o vómitos
5. Falta de aire
6. Desorientación
Especialistas de La Perseverancia Seguros proponen 10 medidas preventivas para evitar intoxicación:
1. Realizar mantenimiento de los artefactos a gas una vez al año con instaladores matriculados:
Verificar que la estufa de tiro balanceado, el calefón o el termotanque posean un conducto
de evacuación de gases. La instalación debe ser efectuada por instaladores matriculados,
quienes deben controlar la correcta ubicación, ventilación y evacuación de gases conforme a
las reglamentaciones vigentes.
2. Controlar que los conductos no estén obstruidos por nidos de pájaros, hojas, hollín,
mampostería, ladrillos o basura.
3. Cuidar que construcciones como cerramientos de balcones, lavaderos, techados de patios
internos, paredes medianeras, no impidan o tapen la libre difusión de los gases hacia el
exterior.
4. No instalar artefactos que no sean de tiro balanceado en el baños, dormitorios y espacios no
ventilados que estén comunicados directamente con ellos.
5. En las cocinas sin ventana es necesario instalar una rejilla de ventilación en la puerta y un
sistema de extracción de aire (campana).
6. No utilizar generadores, parrillas de carbón, estufas ni otros aparatos que funcionen con gas
oil o carbón dentro de la casa.
7. No utilizar hornallas de cocina o el horno como forma de calefacción.
8. Observar la presencia constante de la llama azul. La llama amarilla es signo de combustión
incompleta por falta de oxígeno.
9. Si se duda sobre la existencia de una fuga, no se deben encender las luces, porque la
acumulación de gases puede provocar una explosión.
“En el caso de pensar que uno mismo o alguien a tu alrededor tiene una intoxicación por monóxido
de carbono, se recomienda buscar aire fresco y solicitar atención médica de emergencia”, explica
Adalberto Bruzzone, director de La Perseverancia seguros. Ante cualquier duda consulte siempre un médico/a.