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La Selección Argentina cayó 2-1 ante Arabia Saudita en su debut mundialista en Qatar.
El encuentro comenzó con mucha fricción y a un ritmo frenético. Desde el inicio, el equipo de Lionel Scaloni se posicionó en campo rival e intentó tomar las riendas del juego. Tal es así que Lionel Messi casi logra romper el cero en la primera acción del pero el arquero respondió de la mejor manera para salvar a su equipo.
El 10 iba a tener revancha rápidamente porque el árbitro del encuentro sancionó un penal contra Paredes y le dio la chance de marcar desde los 12 pasos: el capitán no falló y puso el 1-0 parcial.
El dominio argentino se mantuvo con el correr de los minutos. Con juego colectivo y filtrando pases en la última línea rival, Lautaro Martínez quedó dos veces frente al arco y, pese a haber convertido en ambas, las dos acciones fueron anuladas por posición adelantada. En uno de los goles no cobrados deja dudas la posición del laterial de Arabia que parece que habilitaba la jugada. Por lo que para nosotros se trata de un gol válido.
El complemento no fue lo que la Albiceleste esperaba. Al-Shehri ganó la posición y remató contra el palo derecho de Martínez, que nada pudo hacer para evitar el empate parcial. Pero las malas iban a continuar: Al Dawsari realizó una gran jugada individual dentro del área que culminó con un remate que se coló en el ángulo para poner al conjunto árabe al frente.
En el segundo partido del grupo, Polonia empató con México. El arquero del equipo del Tata Martino le atajó un penal a la figura de los polacos.
