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“Sabemos que Lucía no va a volver, pero que se haga justicia es sanador” sostuvo en los tribunales penales platenses la Ministra Estela Díaz quien acompañó a Claudelina Ríos, madre de Lucía Ríos Muller, a las estudiantes del Liceo Víctor Mercante de la Universidad Nacional de La Plata y a organizaciones feministas en la lectura del veredicto.
Pasado el mediodía, el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de La Plata, integrado por los jueces Hernán Decastelli, Cecilia Sanucci y Ramiro Fernández Lorenzo, declaró culpable del "homicidio triplemente agravado por uso de arma de fuego, por el vínculo y por ser cometido por un hombre contra una mujer mediando violencia de género" por el crimen de su ex pareja. Lucía Ríos tenía 16 años de edad cuando fue asesinada por la espalda en su casa de Melchor Romero el 16 de septiembre de 2016.
La Ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la Provincia de Buenos Aires, Estela Díaz, estuvo presente hoy, junto a Claudelina Ríos en la lectura de la sentencia y los fundamentos por el femicidio de Lucía Ríos Muller. “Acompañamos y hemos acompañado a las víctimas desde las organizaciones sociales. Cuando tenemos responsabilidades institucionales, se redobla la responsabilidad en el acompañamiento”, sostuvo.
Luego, la flamante Ministra profundizó: “Esta sentencia es producto de años de luchas del movimiento de mujeres y el feminismo. Vivimos mucho tiempo en que eran desoídas, maltratadas, estigmatizadas, las propias víctimas, esta vez no lo pudieron hacer. Incluso algo de lo que se escuchó por parte de los familiares del femicida, en otros tiempos, hubiesen sido las voces del tribunal. Hoy se está construyendo un piso de derechos con perspectiva de género que van generando sentencias que son aleccionadoras, un piso desde donde transitar hacia adelante”
“No quisiéramos estar hablando de femicidios, pero una vez que existen, que se los sancione como corresponde, que se los nombre como son, y que aprendamos como sociedad que es intolerable la violencia machista” reflexionó la primera Ministra de las Mujeres de la historia bonaerense. “Estar acompañadas y luchar colectivamente y abrazarse en el profundo dolor de escuchar la sentencia da cierta, paz, tranquilidad, cierto alivio de que se haga justicia”.
