martes, 13 de noviembre de 2018

La UNESCO y el Banco Mundial comprometidas con la cultura en la reconstrucción y recuperación urbana


internacional

El Banco Mundial y la UNESCO pondrán de relieve el papel esencial de la cultura en la planificación y financiación de proyectos para ciudades que han sufrido los efectos de la guerra y los desastres, al presentar un nuevo documento de orientación, titulado “Culture in City Reconstruction and Recovery” [La cultura en la reconstrucción y recuperación de las ciudades], en la Sede de la UNESCO el 16 de noviembre.

Entre los participantes en el acto de presentación figuran Mario Sander, Representante Especial y Director para Europa del Banco Mundial, Sameh Wahba, Director de Desarrollo Urbano y Territorial, Gestión del Riesgo de Desastres y Resiliencia del Banco Mundial, Ernesto Ottone R., Subdirector General de Cultura de la UNESCO, Toshiyuki Kono, Presidente del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS), Zaki Aslan, Representante Regional del Centro Internacional de Estudios de Conservación y Restauración de los Bienes Culturales, ICCROM, por los Estados Árabes, Director del Centro Regional para la Conservación del Patrimonio Cultural en el Mundo Árabe (ICCROM-Sharjah), así como el Embajador y Delegado Permanente de Iraq en la UNESCO, Mahmood Al-Mulla-Khalaf, y el Embajador y Delegado Permanente de Kuwait en la UNESCO, Adam Al Mulla.

El documento “Culture in City Reconstruction and Recovery” (CURE) tiene por objeto servir en la planificación de políticas y la ejecución de proyectos para los futuros procesos de reconstrucción y recuperación de las ciudades después de las crisis (conflictos y desastres naturales). Reconoce que las ciudades son construcciones culturales cuya creatividad, tradiciones, hitos y edificios significativos son importantes para el tejido social de sus poblaciones. En el texto, la UNESCO y el Banco Mundial reconocen la importancia de restaurar los hitos culturales y apoyar las expresiones culturales desde la fase de planificación y durante la ejecución de los proyectos de regeneración urbana, que deben también reflejar las necesidades y aportaciones de las comunidades y autoridades locales.

El rápido crecimiento de la urbanización en todo el mundo expone a las ciudades y a sus habitantes a los efectos devastadores de conflictos cada vez más complejos y a desastres naturales cada vez más frecuentes. Para 2030, se estima que los desastres costarán a las ciudades de todo el mundo unos 314.000 millones de dólares al año, casi el doble que el promedio de los 15 años anteriores. El enfoque esbozado en CURE integra la cultura en las políticas de desarrollo urbano sostenible para ayudar a construir entornos urbanos inclusivos, seguros, resistentes y sostenibles para todos. CURE forma parte de una iniciativa más amplia, emprendida tras la firma de un Memorando de Entendimiento entre la UNESCO y el Banco Mundial en julio de 2017, que se centra en la regeneración urbana y los paisajes urbanos históricos, las industrias culturales y creativas, así como en la resiliencia y la gestión del riesgo de desastres, con la cultura como motor.

Las dos organizaciones están actualmente dirigiendo proyectos operativos conjuntos en Armenia, China, Georgia, Haití, Malí, Pakistán y Papua Nueva Guinea. Además, colaborarán en la rehabilitación de Mosul (Iraq), basándose en la Iniciativa “Reavivar el espíritu de Mosul”, lanzada por la Directora General de la UNESCO en febrero de 2018 y en el Proyecto de Operación de Emergencia para el Desarrollo del Banco Mundial.