martes, 20 de mayo de 2014

Comienza el juicio a la obstetra que falsificó el certificado de nacimiento de Catalina


sociedad

Abuelas de Plaza de Mayo informó que hoy martes 20 de mayo comenzará el juicio contra Lidia Fanni Villavicencio, médica obstetra que habría insertado datos falsos en el certificado de nacimiento de la nieta restituida Catalina de Sanctis Ovando y en el libro de partos del Hospital Militar de Campo de Mayo, haciendo constar que era hija de su apropiadora, María Francisca Morillo.

Durante esta audiencia, se prevé que el Tribunal Oral en lo Criminal Nº1 de San Martín, integrado por los jueces Héctor Sagretti, Daniel Cisneros y Daniel Petrone, tome declaración a Catalina, a su pareja, al hijo de la imputada y a Guillermo Adolfo Anzorena, perito calígrafo oficial, quien constató que las firmas en los documentos adulterados pertenecen a la imputada.

Catalina es hija de Raúl de Sanctis y Miryam Ovando, embarazada de seis meses al momento de su secuestro, el 1º de abril de 1977. Miryam permaneció detenida ilegalmente en la localidad de Escobar, en un centro clandestino dependiente de Campo de Mayo, y en agosto de 1977 dio a luz a Laura Catalina.

En diciembre de 1982, los familiares denunciaron la desaparición de Raúl y de Miryam, embarazada. La Asociación recibió diversas denuncias que señalaban que una joven anotada como hija propia por un militar, Carlos del Señor Hidalgo Garzón, y su mujer, María Francisca Morillo, podía ser hija de desaparecidos. A raíz de estas investigaciones, se radicó una denuncia y el juez federal Ariel Lijo ordenó la extracción de muestras de ADN de objetos personales de la joven para compararlas con los perfiles del Banco Nacional de Datos Genéticos.

Se prevé que este juicio se extienda por tres audiencias, dado que el TOF 1 incorporó a la causa los testimonios que se registraron en forma audiovisual durante el proceso en el que se juzgó la apropiación de Catalina, conforme a la acordada 1/12 de la Cámara Nacional de Casación Penal. En ese juicio, el 12 de marzo de 2013, Hidalgo Garzón y Morillo fueron condenados a 15 y 12 años de prisión, respectivamente.