jueves, 18 de febrero de 2010

LA TOS TAMBIÉN EN VERANO


sociedad

Los resfríos suelen asociarse con el invierno y los días fríos y oscuros, sin embargo, es muy común padecer de resfríos en pleno verano. Peor aún, muchas veces los síntomas que anticipan un resfrío comienzan cuando llegamos a nuestro destino de vacaciones. Hasta que comience la tos, es sólo cuestión de tiempo.

¿Cómo se produce el resfrío?
El ser humano respira alrededor de 10.000 litros de aire que pueden contener gérmenes (en especial virus) potencialmente peligrosos para los tejidos de la nariz y garganta. Éstos, con frecuencia, causan congestión y secreción nasal, estornudos, dolor de garganta y tos. Esta última puede tomar la forma de tos productiva, incluyendo la expulsión de mucosidad.

En el caso de los niños, éstos son más susceptibles que los adultos a la tos y los resfríos, dado que su sistema inmune no está aún completamente desarrollado. Por lo tanto, lo sufrirán entre ocho y doce veces durante el transcurso del año, lo cual significa que hasta el 40% de los síntomas pueden ocurrirles en épocas diferentes del otoño e invierno.

Factores que aumentan el riesgo de resfríos en verano

La posibilidad de contagiarse un virus del resfrío en verano es de 1 en 4, en comparación con el invierno. Algunos de los factores que pueden aumentar el riesgo de contagio son:
Viajes prolongados en avión: Dado que la tos promedio se expele a 1.000km/hora, existe gran posibilidad de contagio en espacios cerrados. Los estudios demostraron que las posibilidades de contagio están directamente relacionadas con la cantidad de tiempo que una persona está expuesta a la infección, un viaje prolongado en avión es más riesgoso que un viaje corto.
Viajes al exterior: visitar otro país puede exponernos a infecciones virales que no experimentamos previamente en nuestro país o ciudad.
Aire acondicionado: al extraer la humedad de las vías aéreas –las cuales actúan como nexo entre el ambiente externo y el interno- la exposición al aire acondicionado puede llevar a la infección del sistema respiratorio, causando tos y resfrío.
Estrés: los psicólogos suelen atribuir a las vacaciones una fuente importante de estrés, tanto debido al viaje en sí mismo, como a su planificación y preparación. El efecto puede ser el debilitamiento del sistema inmune, dejándolo expuesto a mayores riesgos.

Cómo tratar la tos productiva

Poco se sabe sobre esta secreción que día y noche se mueve constantemente sobre la superficie de la membrana, como en un “transportador”, eliminando en forma sistemática los gérmenes y contaminantes. Si alguien se contagia una infección respiratoria, la producción de flema pegajosa afecta este sistema de transporte, generando tos productiva. Como se describió en una reciente actualización médica, Mucosolvan®; cuyo principio activo es el Ambroxol; ayuda a restaurar el sistema de “transporte” nuevamente a la normalidad disolviendo la flema pegajosa que se acumula en los bronquios. Mucosolvan® actúa de manera efectiva restaurando los mecanismos de depuración. Mucosolvan® defiende, protege y regula efectivamente la secreción que rodea la membrana mucosa que mantiene la humedad y la salud de las vías aéreas. Así, es posible volver a respirar en forma libre y profunda este verano.

Para más información, visite www.mucosolvan.com.ar

Como siempre, Boehringer Ingelheim recomienda leer atentamente el prospecto y ante la menor duda consultar a su médico y/o farmacéutico.