martes, 15 de abril de 2014

Para el Gobierno el índice de precios creció 2,6% en marzo. La visión de la oposición


economía

El ministro de Economía, Axel Kicillof, informó que los rubros que más influyeron fueron educación e indumentaria. Dijo que se observó una "considerable desaceleración" en casi todos los rubros, que también se extendió a las primeras semanas de abril. En el Microcine del Palacio Hacienda, Kicillof anunció que el Índice de Precios al Consumidor Nacional urbano arrojó una variación del 2,6% en marzo y acumula, en el primer trimestre del año, una variación del 9,7 por ciento.

Afirmó que esta cifra “implica una considerable desaceleración del índice” (en enero y febrero presentó subas de 3,7% y 3,4%, respectivamente), y resaltó que la caída del crecimiento “se observó en todos los capítulos exceptuando indumentaria y educación”, cuyo ascenso se produce por motivos estacionales.

El jefe de la cartera económica explicó que, en rubros como alimentos y bebidas, “el movimiento cambiario de enero generó incrementos muchas veces no justificables”, y remarcó que por la incidencia del programa Precios Cuidados “ahora la desaceleración se empieza a sentir”.

Además destacó que “la desaceleración observada en marzo se ha extendido también a las primeras dos semanas de abril”. Los mayores incrementos se registraron en Educación (6,2%), Indumentaria (5,3%), Esparcimiento (4%), Equipamiento del hogar (3,5%), Transporte (3%), Alimentos (2,4%) y Atención médica (1,3%).

Por otro lado, el ministro criticó la “falta de rigor” en el índice de precios de las consultoras privadas. “Es evidente pero difícil de detallar –subrayó-, porque de ninguna conocemos nada de su metodología, de cuántos comercios relevan ni de qué zonas geográficas, ni la metodología técnica que utilizan”.

Desde la oposición, el vicepresidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados de la Nación, Miguel Bazze (UCR Buenos Aires) afirmó que “el 2,6 por ciento de inflación en marzo anunciado por el INDEC, en el marco de una economía tan estancada, es todavía muy preocupante”. “Más allá de que el índice anunciado por el gobierno es en algunos rubros -como el de la alimentación- es superado por la realidad, está claro que el descenso de la inflación se está logrando a partir de un duro estancamiento de la economía”.

“Este no puede ser el camino. Lograr la reducción de los índices inflacionarios a partir de la recesión traerá aparejada consecuencias realmente graves para la economía e importantes perjuicios sociales”, indicó Bazze. El también vicepresidente del bloque radical agregó que “el Poder Ejecutivo debe entender que tiene que poner en marcha de manera urgente un plan integral para recuperar la inversión, la credibilidad, y la producción, que nos posibilite el crecimiento económico en lugar de apelar al enfriamiento de la economía”.

Finalmente advirtió que “el gobierno disminuye la actividad económica para reducir la inflación y preservar las reservas. En este marco, esta inflación, con una economía estancada, es muy alta”.