sociedad
Un gesto para visibilizar la violencia de género en la Argentina y exigir acciones al Estado
Se realizaron actividades durante el día en las fuentes de la Plaza de los Dos Congresos y de la Plaza de Mayo, donde activistas de Amnistía Internacional tiñeron el agua de violeta como una forma de llamar la atención sobre este problema que cada vez atañe a más mujeres en nuestro país y en el mundo.
Desde las 20:00, Amnistía Internacional iluminó el Puente de la Mujer (Puerto Madero) y la Facultad de Derecho de la UBA de color violeta y así completó 24 horas de activismo a favor de la no violencia hacia las mujeres.
“Con esta acción Amnistía Internacional pretende visibilizar la problemática de la violencia de género –que en 2008 mató, al menos, a una mujer cada tres días en la Argentina— y exigir al Estado nacional medidas concretas para erradicarla”, sostuvo Rafael Barca, director ejecutivo de Amnistía Internacional en la Argentina.
El Estado argentino ha ratificado tratados internacionales sobre derechos humanos mediante los cuales está obligado a proteger de la violencia de género a las mujeres que viven en el país. Sin embargo, los índices de violencia contra las mujeres siguen siendo altos y todavía no existe un plan de acción nacional enfocado a eliminar este flagelo que cuente con medidas coordinadas, efectivas y con un presupuesto suficiente.
“La violencia contra las mujeres es una vergüenza para los derechos humanos. Mientras continúe, será imposible hacer realidad el cumplimiento de los derechos para todas las personas. Aunque no existen cifras oficiales, los datos que relevamos demuestran que el Estado se encuentra lejos de tomar el tema como prioridad”, señaló Gabriela Boada, coordinadora de Campañas de Amnistía Internacional. “Quisimos teñir de violeta a la Capital de la Argentina para que se visibilice el grave problema social que implica la violencia contra las mujeres en todo el país”, concluyó.