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Los activistas de Greenpeace Camila Speziale y Hernán Pérez Orsi llegaron esta mañana al Aeropuerto de Ezeiza, luego de haber estado dos meses detenidos en Rusia, acusados de piratería y vandalismo, tras haber formado parte de una acción pacífica contra la exploración de petróleo en el Ártico.
"Hoy es el día que venimos esperando ansiosos, Camila y Hernán han podido regresar a casa –manifestó Eugenia Testa, directora Política de Greenpeace– Nuestros colegas fueron a Rusia a denunciar la explotación de petróleo en el Ártico, como lo hicimos antes en las costas norteamericanas y en Groenlandia. El Ártico es hoy zona de disputa geopolítica, principalmente por sus recursos y Greenpeace fue allí a hacer lo que nos ha caracterizado por más de 40 años, denunciar pacíficamente y dejar en evidencia lo que empresas como Shell y Gazprom están haciendo con el planeta".
Luego de que fueron recibidos por decenas de familiares, amigos y miembros de la organización, Camila declaró: “Deberían haber permitido que vuelva a casa hace mucho tiempo. Me enfrenté a cargos de 15 años de prisión y ahora me dieron una amnistía por un crimen que nunca ocurrió. Participé en una protesta pacífica contra la extracción de petróleo en el Ártico porque para mí no es una opción que este planeta se desmorone. Por eso, pienso que el riesgo que tomé valió la pena y voy a seguir defendiendo mis creencias”.
Por su parte, Hernán, quien viajó con su mujer y su hija de un año, expresó: “Estamos muy felices de estar en casa y ver a nuestros seres queridos. Por fin esta pesadilla terminó y sólo me resta agradecer a todas las personas alrededor del mundo que nos apoyaron en este difícil momento. Por nuestra parte, las acciones de Greenpeace en el Ártico terminarán cuando sea declarado santuario”.
