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La Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos acogió con beneplácito la decisión de Brasil de procesar al coronel retirado Sebastiao Curió Rodrigues por desapariciones ocurridas entre 1964 y 1985. Éste es un primer paso fundamental en la lucha contra la impunidad de las personas que cometieron crímenes durante la dictadura militar en ese país, dijo hoy el portavoz de esa Oficina de la ONU en Ginebra.
Rupert Colville destacó que es la primera vez que Brasil abre un juicio por violaciones de derechos humanos cometidas durante ese periodo, ya que otros intentos previos fueron bloqueados por interpretaciones de la ley de amnistía de 1979. Curió será acusado de secuestro agravado en relación con la desaparición de cinco miembros del movimiento de Araguaia que fueron detenidos en 1974.
“Este es un acontecimiento muy esperado. Se busca la rendición de cuentas por los cientos de personas desaparecidas durante la dictadura de 21 años. Esperamos que la justicia brasileña respete los derechos fundamentales de las víctimas a la verdad y la justicia, y que permita que el enjuiciamiento siga adelante”, subrayó el portavoz.
Por otra parte, Colville explicó que el delito que se le imputa al ex coronel aún no ha prescrito. “Los argumentos de la fiscalía se basaron en que la ley de amnistía no cubre las desapariciones, ya que los cuerpos de las víctimas aún no fueron encontrados”, dijo el funcionario. Enfatizó que la posición de la Oficina de la Alta Comisionada es de no otorgar amnistías a ningún acusado de crímenes contra la humanidad.
El portavoz también expresó el beneplácito de esa Oficina con la creación de una Comisión de la Verdad para investigar los abusos de derechos humanos cometidos durante el gobierno militar y animó a Brasil a tomar medidas para facilitar los enjuiciamientos, y derogar la ley de amnistía.
“En general, existe una tendencia positiva en la región de hacer justicia por los crímenes cometidos durante los regímenes militares”, concluyó Colville. Por ejemplo, Guatemala anunció recientemente que procesará a un ex dictador, y sentenció a un soldado de las fuerzas especiales por asesinato y crímenes contra la humanidad cometidos en 1982.
