martes, 29 de julio de 2014

Gaza: “Ellos también son nuestros niños”


opinión

Una declaración firmada por 47 galardonados con el Right Livelihood Award de 32 países condena la matanza de civiles, muchos de ellos, niños. Tres galardonados con el Right Livelihood Award viven y trabajan en la zona de conflicto.

“Como galardonados con el Right Livelihood Award, popularmente conocido como “Premio Nóbel Alternativo”, nosotros condenamos enérgicamente la matanza de cientos de niños y civiles inocentes ejecutada en Gaza por el Ejército israelí y el indiscriminado lanzamiento de misiles por parte de Hamas sobre civiles de Israel, al tiempo que lamentamos el continuo sufrimiento de los habitantes de Gaza.

Gaza enfrenta desabastecimiento de agua y electricidad, de hospitales, médicos y medicinas, mientras las bombas y las balas matan e hieren tanto a la sociedad civil como a los trabajadores de salud, en una espiral de violencia y desesperanza. Aproximadamente un 24% de todos quienes perdieron sus vidas en Gaza como resultado de los bombardeos de Israel y su invasión militar, son niños.

Sin embargo, la responsabilidad de estas muertes no es solamente el producto conjunto y múltiple de los soldados de Israel, de los luchadores de Hamas y de sus gobiernos. Otros gobiernos también son responsables, tanto directa como indirectamente, a través de la transferencia de armas, asesoramiento militar y silencio.

Estos países y Naciones Unidas parecen no haber aprendido del pasado. Mientras tanto, aún cuando la violencia crece rápidamente en Gaza, las negociaciones de paz se mueven a un ritmo increíblemente lento, dificultadas por los intereses particulares de países que no sufren derramamiento de sangre por este conflicto. El diálogo y las negociaciones no pueden ser reemplazadas por el uso de la fuerza militar. La venganza solo produce venganza y los derramamientos de sangre solo producen más derramamientos de sangre.

Nadie puede olvidar las recientes imágenes de cuadernos de escuela rotos en las calles de Gaza y las vidas rotas de los niños que los usaron. Sus cuerpos sin vida desparramados cerca de sus cuadernos, que nunca van a ser usados nuevamente, describen la trágica pintura de una crueldad sin límite. Nadie tiene el derecho de terminar con sus vidas ni de amenazar la vida de aquellos niños que siguen sobreviviendo. Ellos también son nuestros niños.

En este contexto nosotros apoyamos con fuerza la el extraordinario y valeroso trabajo, determinación y perseverancia -entre el tronar de las bombas- de nuestro colega Raji Sourani (RLA 2013, Palestina) y sus colegas del Centro Palestino de Derechos Humanos en Gaza, quienes están denunciando las matanzas de civiles inocentes y la continuidad de una guerra sucia no declarada, que va contra los principios de la legislación humanitaria internacional. Nosotros también queremos expresar nuestra profunda admiración por el trabajo de organizaciones de paz de Israel como Gush Shalom (RLA 2001) y el increíble trabajo de todo el personal médico que opera actualmente en Gaza, continuamente señalado por nuestros amigos de Médicos para los Derechos Humanos de Israel (RLA 2010), que siguen portando la antorcha de la humanidad pese a estar expuestos a las inhumanas máquinas de la guerra.

Como galardonados con el Right Livelihood Award nosotros instamos a las Naciones Unidas, a la Unión Europea y a organizaciones regionales como la Liga Árabe y la Organización de Estados Americanos (OEA), y a países de todo el mundo, a unir sus voces, a condenar estas inaceptables violaciones de derechos humanos, a requerir un inmediato cese del fuego, a suspender el bloqueo a Gaza y a pedir nuevas tratativas de paz. Igualmente detener todas las acciones que perpetúan este conflicto, que dificultan una resolución pacífica y que proveen armas a las partes en conflicto. Si nosotros no actuamos con urgencia, más niños y población inocente van a ser asesinados en los próximos días, en las próximas horas, en los próximos minutos, en los próximos segundos”.

La Fundación Right Livelihood Award: fue fundada en 1980, el Right Livelihood Award –conocido también como Premio Nóbel Alternativo- es entregado anualmente en el Parlamento Sueco. Fue creado para “honrar y apoyar las respuestas prácticas y ejemplares a los desafíos actuales más urgentes”. Jacob von Uexkull, un filatelista profesional de origen sueco-alemán, vendió su colección de estampillas para obtener los primeros recursos para financiar este premio. Desde entonces, la Fundación se sostiene gracias a donaciones individuales. A la fecha, han sido galardonados 153 personas y organizaciones pertenecientes a 64 países.