sociedad
Un nuevo escándalo sacude el mundo de la moda. Greenpeace publicó en su sitio web un video donde parodia a Batata, el perro de raza basset hound que es la cara de la marca Hush Puppies, donde el propio can denuncia a sus patrones de Grimoldi, licenciataria de la marca de zapatos, por la contaminación en el Riachuelo.
En el video, Batata, la famosa mascota de Hush Puppies, revela que la marca para la que trabaja hace muchísimos años fabrica sus zapatos con cuero de industrias que están contaminando el Riachuelo con sustancias tóxicas y contaminantes. Para dejar de ser cómplice de la contaminación, Batata necesita que Grimoldi, dueño de Hush Puppies, exija a sus proveedores que cumplan con políticas ambientales, y se comprometan a eliminar las sustancias tóxicas que están vertiendo en la Cuenca.
“La responsabilidad de un productor no se limita a su uso como un bien de consumo. Las empresas que pretenden asumir la responsabilidad de sus productos deben considerar todo el ciclo de vida de los mismos. Las marcas líderes que se proveen de productos procedentes de los sectores contaminantes de la Cuenca del Riachuelo, deben tomar la iniciativa y aceptar la responsabilidad de los vertidos de sustancias peligrosas y contaminantes. Por este motivo, es necesario que implementen una serie de medidas en su cadena de suministro, que vaya mas allá de la responsabilidad corporativa propia de la empresa”, manifestó Consuelo Bilbao Coordinadora de la Campaña Riachuelo de Greenpeace.
Un nuevo escándalo sacude el mundo de la moda. Greenpeace publicó en su sitio web un video donde parodia a Batata, el perro de raza basset hound que es la cara de la marca Hush Puppies, donde el propio can denuncia a sus patrones de Grimoldi, licenciataria de la marca de zapatos, por la contaminación en el Riachuelo.
En el video, Batata, la famosa mascota de Hush Puppies, revela que la marca para la que trabaja hace muchísimos años fabrica sus zapatos con cuero de industrias que están contaminando el Riachuelo con sustancias tóxicas y contaminantes. Para dejar de ser cómplice de la contaminación, Batata necesita que Grimoldi, dueño de Hush Puppies, exija a sus proveedores que cumplan con políticas ambientales, y se comprometan a eliminar las sustancias tóxicas que están vertiendo en la Cuenca.
“La responsabilidad de un productor no se limita a su uso como un bien de consumo. Las empresas que pretenden asumir la responsabilidad de sus productos deben considerar todo el ciclo de vida de los mismos. Las marcas líderes que se proveen de productos procedentes de los sectores contaminantes de la Cuenca del Riachuelo, deben tomar la iniciativa y aceptar la responsabilidad de los vertidos de sustancias peligrosas y contaminantes. Por este motivo, es necesario que implementen una serie de medidas en su cadena de suministro, que vaya mas allá de la responsabilidad corporativa propia de la empresa”, manifestó Consuelo Bilbao Coordinadora de la Campaña Riachuelo de Greenpeace.