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Según declaraciones realizadas a la prensa, el Presidente ruso, Vladimir Putin, afirma que los 30 activistas de Greenpeace detenidos por las autoridades rusas “claramente no son piratas”, pero sugirió que podrían haber violado leyes internacionales.
Esta aclaración fue realizada en un foro sobre el Ártico en la ciudad de Salekhard, Rusia, a lo que el Director Ejecutivo de Greenpeace Internacional, Kumi Naidoo, respondió: "Celebramos que el presidente Putin reconozca que nuestros activistas no han cometido un acto de piratería y que actuaron guiados por una sincera preocupación por el medio ambiente del Ártico”.
Los activistas trataron de escalar una plataforma de la empresa Gazprom para llamar la atención sobre la amenaza que implican las perforaciones petroleras en el Polo Norte y sobre la necesidad urgente de hacer frente al cambio climático. Esta fue una protesta pacífica contra la ambición de la petrolera que desea ser la primera empresa en extraer petróleo de los mares helados de esta frágil región.
Las autoridades rusas dieron a conocer hoy nuevas imágenes, tomadas desde la plataforma, que muestran a las fuerzas de seguridad rusas enfrentando a dos escaladores durante la protesta el miércoles pasado.
Allí se observa a la escaladora finlandesa Sini Saarela en una situación de peligro y gritando “¡Voy a bajar, estoy bajando! " mientras que los agentes armados tironean descuidadamente la cuerda de seguridad que ella utiliza para aferrarse a la estructura. El video también muestra cómo disparan con armas de municiones en el agua a pesar de que un activista a bordo de un gomón de Greenpeace está levantando sus manos al aire en señal de paz.
"El verdadero crimen es la destrucción del Ártico que promueven petroleras como Shell y Gazprom.", declaró Mauro Fernández, de la campaña del Ártico de Greenpeace en Argentina. "La única ilegalidad fue cometida por la Guardia Costera rusa cuando abordó el barco de Greenpeace en aguas internacionales, una zona de libre tránsito marítimo y donde no tienen jurisdicción".
En varias ocasiones Greenpeace Rusia contactó tanto a Gazprom, como a las autoridades oficiales, para explicar la oposición pacífica de la organización a las perforaciones en el Ártico.
Los 30 activistas permanecen detenidos en un comité de investigación de la ciudad de Murmansk donde anoche cinco activistas fueron indagados y se entregaron papeles que confirman que estaban siendo investigados por piratería. Sin embargo, aún no han sido acusados de ningún delito. Foto de Camila, la activista argentina detenida.
