política · ciudad autónoma de buenos aires
“Las mediciones de ayer, en River, demostraron que no se superaron ni lo límites sonoros ni vibratorios. El resultado fue contundente: 0 por ciento”, señaló Diego Santilli. “Es decir, no hubo pogo, no hubo vibraciones perjudiciales para los edificios vecinos”, agregó el ministro de Ambiente y Espacio Público. Anoche, el Ministerio a través de la Agencia de Protección Ambiental (APRA), realizó los controles sobre ruidos y vibraciones durante el recital de Bon Jovi, en el estadio de River Plate.
“Estamos trabajando para conciliar los intereses de todos. River es muy importante para la actividad cultural de la Ciudad y queremos que siga siendo un lugar de disfrute artístico. De la misma manera, defendemos el derecho al descanso y la seguridad edilicia de sus vecinos”, añadió el Ministro.
Fueron más de dos horas de concierto, donde los equipos técnicos, controlaron que no se superaran los límites sonoros (100 decibeles en la cancha, 75 fuera) y vibratorios establecidos. Vale recordar que en estos momentos, en River, el público que asista al campo durante un recital debe estar sentado, hasta que no se encuentre una superficie adecuada para reducir el impacto de los saltos y el pogo.
Los técnicos del ministerio, supervisados por el ministro Santilli y por el titular de APRA, Javier Corcuera, trabajaron tanto dentro del estadio como afuera, ubicándose en un edificio cercano, seleccionado como de “riesgo para vibraciones”.
Los resultados de las mediciones efectuadas, como indicó Santilli, fueron satisfactorios. “Hubo nula superación de los límites, mientras que en los últimos conciertos, como el de AC/DC, a fines del año pasado, habían llegado hasta un 41 por ciento de exceso del límite establecido. No obstante, entendemos que lo ideal es que haya gente parada y haciendo pogo porque eso significa entradas más baratas para todos así que tendremos que seguir trabajando para lograr que haya pogo pero sin vibraciones perjudiciales y eso se puede conseguir con más inversión en el estadio”, concluyo Santilli.
El de Bon Jovi dio inicio a una serie de recitales donde se establecen limitaciones para el campo de juego de River. Por motivo de las vibraciones no puede haber gente de pie en ese sector y, por ello, se lo dividió en zonas con sillas atornilladas al piso. De esta manera, se evitó el pogo.
De hecho en las próximas horas está previsto que se den a conocer los resultados de los estudios realizados el pasado 8 de septiembre en River donde se probaron distintos tipos de cubrecampos para reducir el efecto vibratorio.