internacional
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos llamó hoy al gobierno de China a asegurar las garantías fundamentales en la región del Tíbet.
Navi Pillay expresó consternación por las alegaciones de violencia, torturas y malos trantos en esa región, que han provocado 60 casos de autoinmolación desde 2011.
Asimismo, pidió a las autoridades chinas que permita el ingreso de observadores independientes e imparciales para que evalúen la situación in situ, señaló su portavoz en Ginebra, Rupert Colville.
“También solicitó la liberación de todas las personas detenidas por el simple hecho de ejercer su derecho de asamblea pacífica y de expresión. Además, pidió a los tibetanos abstenerse del uso de formas extremas de protesta, como la autoinmolación, y urgió a los líderes comunitarios y religiosos a usar sus influencias para ayudar a poner fin a esta trágica pérdida de vidas”, dijo el portavoz.
Pillay reconoció el sentimiento intenso de frustración y desesperación de los tibetanos que los ha llevado a tomar medidas tan extremas, pero sostuvo que hay otras maneras de encausar esos sentimientos.