sociedad
El informe alerta además acerca de que la pérdida de deseo puede ser un indicativo de otros
problemas de salud.
Un reciente estudio del Boston Medical Group, alianza mundial de clínicas
especializadas en el tratamiento de disfunciones sexuales masculinas, indica que un bajo nivel
de testosterona es la causa de más del 70% de los casos de pacientes que sufren falta de deseo
sexual. Como principal hormona masculina, la testosterona juega un papel crucial en el desarrollo
de una vida sexual plena y saludable, así como en el correcto funcionamiento del organismo. Los
resultados del estudio realizado por el Boston Medical Group se han obtenido a partir del análisis
de más de 500 pacientes con falta de deseo puro.
Al contrario de la creencia generalizada, que consideraba como principal causa de la falta de
deseo a algún factor psicológico, en la mayor parte de los casos esta responde a un trastorno
hormonal, que puede tener efectos en otros aspectos de la salud.
“La testosterona es un andrógeno que ayuda en la producción de espermatozoides en los hombres,
pero además es responsable de estimular y mantener la función sexual masculina. Cuando los
niveles de testosterona se reducen en el organismo por diferentes motivos se produce una pérdida
de deseo sexual, y en algunos casos incluso puede llegar a producir disfunción eréctil”, explica el
Dr. Fabián Gómez (MN 135992), asesor científico para Argentina de Boston Medical Group.
Es importante destacar también que esta hormona es la encargada de desarrollar otras
características sexuales secundarias masculinas como el vello facial, el engrosamiento de la
voz de los chicos durante la pubertad y aumento de la masa muscular y la fuerza, además de
mantener la densidad ósea. “La testosterona es una hormona que cumple un papel fundamental
para el correcto funcionamiento del organismo, por lo que es importante controlar su correcto
funcionamiento”, detalla Gómez y agrega: “Al igual que sucede con otras patologías sexuales
masculinas, la falta de deseo puede ser un indicador de que algo en nuestro organismo no funciona
correctamente y es muy importante acudir al médico especialista”.
Los niveles de testosterona se reducen de forma natural a partir de los 30 años, pero existen
otras causas que pueden provocar una disminución de estos niveles, algo que afecta al 5%
de los hombres (y casi al 20% de los mayores de 70 años). Una disminución anómala de los
niveles de testosterona puede deberse a diferentes problemas de salud como: la pérdida de
uno o dos testículos; deficiencia de zinc; hipogonadismo primario o secundario; diabetes desde
edades tempranas; o incluso un síntoma de determinados tumores cerebrales. Además, algunos
hábitos de vida poco saludables también interfieren en la alteración de los niveles correctos de
testosterona, como la obesidad o el abuso del alcohol. La obesidad supone uno de los principales
factores de riesgo en varones, ya que los tejidos adiposos facilitan la conversión de la testosterona
en estrógenos, hormona femenina.
Algunos de los síntomas más comunes, consecuencia de un bajo nivel de testosterona son: falta
de deseo sexual, disminución de las erecciones matinales, disfunción eréctil, flacidez muscular
y cansancio físico. Los niveles normales de testosterona varían entre 300 a 1.200 ng / dl. y se
pueden conocer gracias a un sencillo análisis de sangre. Es recomendable tratar a los pacientes
cuyos niveles están por debajo de 300, por lo cual es importante acudir a un especialista ante la
falta de deseo sexual.