política
“Ni el propio gobierno cree en las cifras del INDEC. Por ejemplo, en el proyecto de presupuesto para 2012 plantean un aumento de la recaudación por IVA de un 22 % mayor a 2011, cuando estiman que el crecimiento será de 5 % y la inflación del 9 %. Está claro que no creen que esa sea la inflación real”, afirmó hoy el candidato a vicepresidente de la Nación, Javier González Fraga, al participar de un acto en defensa del INDEC realizado frente a la sede del organismo junto a los candidatos a Diputados Nacionales por la ciudad de Buenos Aires, Manuel Garrido, Hernán Rossi, Fabiana Campos y Magdalena Iraizoz.
“Son muchos los perjuicios que tenemos en la Argentina por el despilfarro hecho con el INDEC. Entre otras cosas, ha significado que el país esté excluido de los mercados financieros, lo que lleva a las empresas particulares a no poder obtener financiamiento para la compra de bienes de capital a tasas convenientes. Así, hay menor inversión y por lo tanto menor trabajo”, explicó, para luego agregar: “Para tener trabajo hay que crear condiciones para la inversión, y para generar condiciones para la inversión hay que controlar la inflación. Pero no se la puede controlar si no se lo reconoce. El INDEC es parte de una política económica equivocada que es la causal de que no se genere trabajo en la Argentina”.
“Entre otras cosas, la Argentina no puede usar las políticas antiinflacionarias que han usado todos los países que combatieron exitosamente la inflación sin enfriar la economía, que se basa en el control de las expectativas. Mal pueden controlarse las expectativas si se dice que la inflación es menor al 10 %”
“El INDEC subestima la pobreza –continuó-. Nos quieren hacer creer que con cinco pesos por día un adulto puede comer, es decir que con 600 pesos por mes una familia estaría fuera de la indigencia. Habría que encerrar a los funcionarios del INDEC en una casa y ver si con 600 pesos por mes comen ellos y su familia durante un mes”.
“Para solucionar esto tenemos una receta muy sencilla: hay que reintegrar a los que fueron despedidos injustamente por la intervención y revisar si los nuevos nombramientos tienen las credenciales suficientes para estar en un organismo que hasta 2006 fue independiente y con prestigio internacional”, dijo y finalizó: “Atrás de toquetear los índices también está el atropello a la Justicia, el mentir con Schoklender, el atropello a las instituciones. Un gobierno que miente no es un gobierno serio”.
Luego, el primer candidato a diputado nacional, Manuel Garrido, aseguró que “desde el Congreso vamos a trabajar para la recuperación del INDEC. Es necesario reponer la situación anterior al copamiento y armar una Comisión Investigadora no solo para verificar la adulteración de estadísticas, sino también la inaudita e inédita violencia laboral que se viene desplegando en el Instituto desde 2007. Un gobierno que dice que no reprime ha erigido sin embargo en el INDEC un monumento a la represión de los trabajadores que se han resistido a delinquir o han colaborado con la justicia. El juez Canicoba Corral también debe responder por no cumplir con sus funciones y encubrir las falsedades y la represión montada en el INDEC".
Por último, Hernán Rossi, segundo candidato a diputado nacional, enfatizó que “el INDEC es la más concreta prueba de la falta de seriedad de este Gobierno. Falsear los datos y acomodarlos a la conveniencia no colabora en la tarea de diseñar políticas públicas que solucionen los problemas de los argentinos”.
“Son muchos los perjuicios que tenemos en la Argentina por el despilfarro hecho con el INDEC. Entre otras cosas, ha significado que el país esté excluido de los mercados financieros, lo que lleva a las empresas particulares a no poder obtener financiamiento para la compra de bienes de capital a tasas convenientes. Así, hay menor inversión y por lo tanto menor trabajo”, explicó, para luego agregar: “Para tener trabajo hay que crear condiciones para la inversión, y para generar condiciones para la inversión hay que controlar la inflación. Pero no se la puede controlar si no se lo reconoce. El INDEC es parte de una política económica equivocada que es la causal de que no se genere trabajo en la Argentina”.
“Entre otras cosas, la Argentina no puede usar las políticas antiinflacionarias que han usado todos los países que combatieron exitosamente la inflación sin enfriar la economía, que se basa en el control de las expectativas. Mal pueden controlarse las expectativas si se dice que la inflación es menor al 10 %”
“El INDEC subestima la pobreza –continuó-. Nos quieren hacer creer que con cinco pesos por día un adulto puede comer, es decir que con 600 pesos por mes una familia estaría fuera de la indigencia. Habría que encerrar a los funcionarios del INDEC en una casa y ver si con 600 pesos por mes comen ellos y su familia durante un mes”.
“Para solucionar esto tenemos una receta muy sencilla: hay que reintegrar a los que fueron despedidos injustamente por la intervención y revisar si los nuevos nombramientos tienen las credenciales suficientes para estar en un organismo que hasta 2006 fue independiente y con prestigio internacional”, dijo y finalizó: “Atrás de toquetear los índices también está el atropello a la Justicia, el mentir con Schoklender, el atropello a las instituciones. Un gobierno que miente no es un gobierno serio”.
Luego, el primer candidato a diputado nacional, Manuel Garrido, aseguró que “desde el Congreso vamos a trabajar para la recuperación del INDEC. Es necesario reponer la situación anterior al copamiento y armar una Comisión Investigadora no solo para verificar la adulteración de estadísticas, sino también la inaudita e inédita violencia laboral que se viene desplegando en el Instituto desde 2007. Un gobierno que dice que no reprime ha erigido sin embargo en el INDEC un monumento a la represión de los trabajadores que se han resistido a delinquir o han colaborado con la justicia. El juez Canicoba Corral también debe responder por no cumplir con sus funciones y encubrir las falsedades y la represión montada en el INDEC".
Por último, Hernán Rossi, segundo candidato a diputado nacional, enfatizó que “el INDEC es la más concreta prueba de la falta de seriedad de este Gobierno. Falsear los datos y acomodarlos a la conveniencia no colabora en la tarea de diseñar políticas públicas que solucionen los problemas de los argentinos”.