política
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, supervisó una serie de exámenes toxicológicos sorpresivos, no invasivos y confidenciales realizados al personal de la Policía Federal Argentina, en la sede de la Policía Montada. El objetivo: cuidar la integridad física y potenciar la labor de los agentes de las fuerzas de seguridad.
“Estos controles toxicológicos y aleatorios a las cuatro fuerzas federales buscan proteger la vida de los ciudadanos y la de los propios policías”, afirmó la ministra Bullrich acerca de la medida preventiva, y luego aseguró: “El mecanismo detectará cualquier estupefaciente o sustancia que disminuya sus capacidades de atención en la tarea policial”.
La política de prevención, coordinada por la Dirección Nacional de Control de Integridad de las Fuerzas de Seguridad –a cargo de Pablo Costa- cuenta actualmente con 500 pruebas finalizadas. A su vez, cabe resaltar que, con el mismo fin, se están llevando a cabo test de alcoholemia a todos los agentes de las fuerzas federales.
Los análisis, con una muestra de saliva y en menos de ocho minutos, son capaces de encontrar una amplia variedad de drogas: anfetaminas, marihuana, cocaína, benzodiacepina, metanfetaminas y opiáceos. Las máquinas empleadas, además, imprimen un ticket que luego tiene que firmar el agente y operador involucrado.
Los análisis toxicológicos forma parte de una de las metas del “Acuerdo de Valores y Principios” firmado a fines del año pasado por la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich; y los jefes de la Policía Federal Argentina, Gendarmería Nacional Argentina, Prefectura Naval Argentina y Policía de Seguridad Aeroportuaria.
