opinión
Los padres siempre tienen opiniones y deseos para el futuro educacional y laboral de sus hijos. El momento crítico de pasaje de la adolescencia al mundo adulto de los hijos revive en ellos las dudas temores y conflictos que afrontaron al tener que realizar las propias elecciones y los enfrenta a los resultados de las mismasya sea que hayan elegido una profesión o hayan optado por otra actividad.
Pero muchas veces ante el temor de influir en la toma de decisión del joven los padres adoptan una actitud pasiva y no participativa. Desconocen el hecho de que sus ideas y creencias concientes y/o inconcientes se expresarán igualmente en acciones gestos mensajes indirectos no verbales en su distanciaetc.
La opción no es participar activa y verbalmente o no participar sino que lo importante es “cómo” participar.
Se puede participar verbalmente dando opiniones en un contexto de diálogo respetuoso que fomente la aparición del pensamiento autónomo y libre del adolescente y la expresión de sus deseoso imponiendo mandatos y saberes que los cercenen.
Si bien la actividad más importante es la que va a desarrollar el joven al considerar toda las variables de la elección es importante que los padres participen ayudándolo a pensar brindando información contando sus propias experiencias conectando a sus hijos con profesionales de las carreras elegidas devolviéndoles la imagen que tienen de ellos recordándoles sus juegos infantiles sus hobbies sus intereses en general etc.
Los padres pueden tener un mejor conocimiento sobre este tercer milenio de cambios constantes en el cual la oferta de estudios y de instituciones educativas se ha ampliado enormemente el trabajo se ha distribuido mundialmente y se ha hecho más escaso en algunos países.
Los requerimientos para los puestos efectivos son exigentes. Ya no alcanza con una carrera de grado se necesitan conocimientos del uso de tecnologías de idiomas y con frecuencia post grados especializados realizados en el país o en el exterior.
En este contexto incierto la elección se ha hecho más difícil y complicada. Hay que tomarse más tiempo para buscar información reflexionar sobre ella y finalmente decidir basándose en el conocimiento de sí mismo para evitar tomar decisiones impulsivas que resuelvan el estado de ansiedad.
Los padres son una variable importante en el proceso de elección de los hijos y realizar una entrevista con ellos en el proceso de orientación vocacional suele ser de utilidad.
También son eficaces colaboradores de los hijos al aconsejarles la consulta con profesionales cuando detectan dificultades particulares que obstaculizan la toma de decisión.
Por la licenciada Marta Gfell
Integrante de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA)
