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Ford desarrolló una nueva tecnología de software y componentes para pruebas con
robots en vehículos autónomos y permitirá el uso de la licencia por otras marcas
automotrices.
Ford desarrolló junto con la empresa
Autonomous Solutions Inc. (ASI por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos, una
nueva tecnología de software y componentes para pruebas con robots en vehículos
autónomos que ha sido patentada por la marca.
Anunció que además, permitirá el uso de la licencia por otras marcas automotrices lo
que contribuirá con una reducción significativa del tiempo de desarrollo de proyectos y al
mismo tiempo evita el desgaste físico de los conductores durante las pruebas de
durabilidad, que incluyen el manejo sobre pistas llenas de baches y otros obstáculos.
El conjunto robótico incluye un módulo de control del volante y otros controles para el
acelerador y el freno. El módulo es programado para seguir una ruta pre-definida
monitoreado remotamente desde un centro de control dotado con cámaras y GPS que
garantizan una precisión de menos de dos centímetros.
Si el vehículo sale de la ruta, los ingenieros pueden pararlo, corregir la trayectoria y
reiniciar la prueba. Los sensores a bordo también consiguen hacer una parada total si un
peatón u otro vehículo se cruzan en el camino. Los vehículos controlados por robots son
utilizados para pruebas repetitivas en pistas extenuantes, capaces de simular 10 años de
conducción y abusos diarios en circuitos relativamente cortos de algunas cuadras de
extensión y superficies como pavimento en mal estado, ripio, charcos de barro y otros
diferentes obstáculos.
“Lo que llamamos kit de pruebas robóticas ya está disponible para la compra directamente
en ASI” dijo Chris Danowski, Director de licencias de propiedad intelectual de Ford Global
Technologies. “Varios fabricantes de equipamiento automotriz ya encargaron el sistema
para sus propias pruebas”.
Utilizada desde 2013, esta tecnología de Ford recibió mejoras significativas en materia de
precisión y tiempo de reacción del acelerador y el freno. Cambios en el diseño también
simplificaron su instalación en el vehículo y permiten una rápida desactivación para que
los ingenieros puedan tomar el control del volante.