miércoles, 2 de mayo de 2012

Activista Argentina arrestada por defender el Ártico


sociedad



Una joven argentina de 22 años y otros 48 activistas de Greenpeace fueron arrestados en la tarde de ayer cuando abordaban un buque rompehielos de la petrolera Shell en el puerto de Helsinki, para exigir a la compañía que abandone sus exploraciones en el Artico. Activistas provenientes de 13 países diferentes, abordaron esta madrugada el Nordica, una embarcación contratada por la compañía petrolera, se encadenaron al mástil y a la cabina del buque y demoraron su partida. 

Más de 10 horas después, cuando un segundo grupo de ambientalistas se disponía a abordar la embarcación, fueron detenidos por la policía local. Entre ellos, se encuentra Maite Ruggieri, voluntaria y activista de Greenpeace Argentina desde 2009, "Estoy aquí para decir no a la perforación del Ártico y pedir la protección de uno de los entornos más frágiles y hermosos del mundo.", declaró Maite antes de iniciar hoy la actividad. Shell es la primera gran compañía internacional que está realizando exploraciones en el Artico con el objetivo de extraer petróleo y, si sus exploraciones programadas para este año prosperan, otras empresas podrían seguir su ejemplo. Por primera vez en nuestra historia nos encontramos con la posibilidad de un mundo sin hielo en el Polo Norte y sin un hogar para los osos polares y otras especies como morsas o narvales. “Estamos llevando adelante estas acciones para defender el hogar de los osos polares y otras especies únicas que están en peligro. Pero no estamos solos. Ya nos acompañan más de 400.000 personas que reclamaron a Shell que abandone sus planes de destruir el Ártico", dijo Hernán Nadal, coordinador de la campaña del Artico de Greenpeace. El total de las reservas de petróleo estimadas en el Ártico podría satisfacer tan sólo tres años de la actual demanda mundial de crudo, sin embargo contribuirían de manera significativa al aumento de las emisiones de carbono y explotarlas supondría una grave amenaza para el ecosistema Ártico. 

Las temperaturas bajo cero, el clima impredecible, y la distancia de los sitios de perforación, plantean desafíos sin precedentes y un derrame de petróleo en el Ártico sería imposible de contener y limpiar. Las condiciones climáticas extremas de la zona ártica y la corta temporada de verano hacen que Shell tenga una ventana muy pequeña de tiempo para la perforación de los pozos exploratorios antes del regreso de hielo marino invernal. Con este bloqueo, los activistas obligan a Shell a modificar el cronograma y retrasar la explotación en el Ártico. Cientos de miles de ciudadanos de todo el mundo ya están enviando su reclamo a la compañía petrolera para exigirle que detenga sus planes de exploración y no destruya el Artico.